Carmen Beceiro lleva 21 años en el sector asegurador. Empezó como agente exclusivo de una aseguradora hasta que en el año 2006 comenzó su actividad como corredora de seguros en Roalga Gestión de Riesgos, donde permaneció hasta 2019. En esa fecha crea CB Mediadores de Seguros, un espacio ubicado en la plaza Doctor Iglesias Parga 11 (Ferrol) que comparte actualmente con Juan Franco Abogados y la directora de la inmobiliaria INMO Perfil, Graciela Oliveira. Los tres confluyen en este espacio de coworking donde no solo trabajan, sino que generan un intercambio de conocimiento. Se trata de una modalidad a la que cada vez se apuntan más personas que necesitan un espacio físico para atender a sus clientes sin la obligación de hacer frente a todos los gastos que implica hacerlo de manera individual.
Carmen conoció a Juan Franco hace seis años a través de un contacto común aunque, en realidad, ella ya lo había visto en su programa de Televisión de Ferrol, El abogado responde, que lleva diez años emitiéndose. A la hora de compartir espacio él es muy positivo: «Siempre se generan sinergias e, incluso, hay clientes que pueden necesitar los servicios de ambos. Mi trabajo sería muy diferente si trabajase solo porque muchas veces estoy fuera; pero sé que aquí siempre hay alguien», valora.
Franco es especialista en asesoramiento jurídico, civil y mercantil; pero su trabajo se centra, sobre todo, en derecho a los consumidores. De hecho, es delegado de la Asociación Europea de Consumidores Derecho y Compromiso (ASEC) y actualmente trabaja defendiendo los intereses de personas que han sufrido la peor cara de la crisis bancaria del 2008, como la venta de preferentes y subordinadas, logrando importantes hitos jurídicos.
Desde 2017 trabaja intensamente con el caso del Banco Popular, donde miles de personas se vieron especialmente perjudicadas con su compra por parte del Banco Santander en junio de ese mismo año. Muchos se quedaron a cero cuando eran accionistas o contrataron subordinadas, entre otras cuestiones. Franco se muestra contento porque está logrando que la gente recupere su dinero sin que ellos tengan que desembolsar previamente ni un euro, puesto que una de sus condiciones es que solamente cobra si las demandas de sus clientes son estimadas.
El mundo de los seguros también ha cambiado mucho su escenario por la crisis del coronavirus. Han bajado las ventas de automóviles y se hacen menos seguros de coche; sin embargo, han crecido mucho los seguros de vida y los domésticos. Para Carmen lo más destacable es que con la pandemia se han adaptado a las nuevas tecnologías, videoconferencias, teléfono, correo electrónico e incluso redes sociales para atender a los clientes y evitar las visitas en la oficina.
Actualmente, los mediadores sufren la competencia de la banca con la venta de los seguros vinculados a cuentas que conllevan rebajas de comisiones. Advierte Carmen que es más importante asesorar en función de las necesidades de cada persona, por eso es preferible acudir a un profesional independiente. Ahonda en que, cuando hay siniestros, muchas personas que no lo hacen se encuentran desprotegidas: «Es preferible perder una operación que la confianza de un cliente».
Tras el parón y la soledad que despertó el confinamiento, CB Mediadores ha realizado una nueva incorporación a su espacio. Se trata de INMO Perfil, dirigida por Graciela Oliveira, que también conocía a Carmen desde hace años y buscaba oficina. «Al cliente se le da seguridad al saber que existes en un espacio físico y que te ubica sin pensar que pueda ser un fraude inmobiliario de Internet», explica. Tras meses encerrados en casa ha subido muchísimo la demanda de viviendas con terreno, se ha incrementado notablemente frente a la demanda de la compra de pisos. De hecho, los anuncios de su página web han sido vistos por más de 300.000 personas.
Asegura Graciela que la demanda de alquiler sigue existiendo y además ahora va con seguro de impagos, lo que ayuda mucho a dar seguridad a los propietarios a la hora de alquilar las viviendas que tienen vacías en este momento de tanta inestabilidad económica a nivel social. Resalta también la solidaridad de muchos de ellos al ayudar a sus inquilinos bajando precios e incluso perdonando alquileres durante el estado de alarma. Un trato cercano que también es seña de identidad de INMO Perfil.
La atención personalizada marca la diferencia. Se hacen responsables del alquiler desde que alguien entra en la vivienda, median entre propietario e inquilino, dan asesoramiento legal gratuito en las necesidades de sus clientes e incluso desempeñan el rol de caseros para que los dueños se puedan desentender en caso de averías fuera del horario habitual. INMO Perfil se encarga de las altas de luz y agua, trámites aparentemente sencillos que llevan mucho tiempo y acaban siendo engorrosos. Sus clientes están muy agradecidos y obtiene muy buenas críticas: «Hoy mismo tenemos una visita a una casa porque vamos a enseñar cómo funciona una calefacción, vamos de trámites sencillos a cosas más complicadas», explica Graciela.
Para Carmen, Juan, Graciela y sus equipos compartir espacio es un buen remedio contra la soledad de la oficina. Una forma de seguir generando trabajo entre personas de sectores muy relacionados, pero, sobre todo, destacan que es la mejor fórmula para que el cliente siempre salga beneficiado.
Noticia: Ferrol360.
Fotografía: Alicia Seoane.